
Hablamos de arte figurativo pero con tendencias realistas al más puro estilo kitsch pero en el sentido positivo (sobre el negativo puedes refrescar la memoria con Javier Miquel) que sin aportar nada nuevo en este (lo sé) complicado e hiperpoblado mundo del arte consigue seducir a mucha gente.
En cierta forma, los trazados me remiten al cubismo, de una manera superficial pero sugestiva, que aunque no te interese mucho el fondo ( a mí desde luego no) la forma resulta la mar de curiosa.
Reconozco que te puedes llevar a engaño sólamente observando las fotografías de la muestra, donde no se aprecia en absoluto las texturas y la técnica y que, incluso puede causar que no te apetezca nada acercarte. Hazme caso, yo le dí una oportunidad y aunque no es santo de mi devoción, siempre es bueno intentar aprender de todo lo posible.
Hay gente que observa optimismo, suaves evanescencias, una búsqueda de síntesis en la obra de la pintora afincada en Valencia yo además de todo ésto, que es bien cierto, encuentro la repetición de una fórmula artística que creía ya desgastada.
Para los fitólogos más clásicos que piensan que los noventa fueron años mejores.
Exposición MARY MATA
Galería de arte Pizarro
hasta el 7 de noviembre de 2007