
La primera vez que lo vi no pude más que enamorarme al instante de este lugar y es que es único en su género, no he visto nada igual en toda la ciudad.
Se trata de un pequeño vivero o tienda de plantas instalada en el patio de una de las casas que dan a la plaza. Si no prestas atención, puedes confundirlo con un jardín privado, pero lo cierto es que Mar, la dueña y creadora de este lugar, aprovechó este espacio para ofrecer al público su gusto y sensibilidad con las plantas y flores.

Si cruzas la puerta del patio, descubrirás un montón de posibilidades y opciones diferentes y originales de colocar o decorar espacios con plantas, sobre todo reutilizando objetos que en principio nada tienen que ver con la jardinería.
Podrás ver zapatos de flamenca o cáscaras de huevo usados como macetas, jaulas de pájaros de las que crecen flores o lámparas por las que trepan verdes enredaderas. Toda una exposición de opciones creativas para combinar decoración, reciclaje y jardinería.
Además de plantas, venden objetos de decoración para jardín así como complementos para el cuidado de las plantas: abonos, sistemas de riego, tierra, macetas…

También realizan proyectos de jardinería y decoración tanto para exteriores como para interiores. Así que si te gusta su original estilo, puedes preguntar o simplemente pedir asesoramiento sobre el cuidado de tus plantas y flores, ya que es otro servicio que prestan.
Esta pequeña tienda familiar me parece uno de los lugares que no puedes dejar de visitar si pasas por la Alameda.
En DolceCity Sevilla: La Mar de Flores