En cuanto pones un pie en Numa sabes que estás entrando en un restaurante de alta cocina italiano, y al poco tiempo te das cuenta de que ofrece sabores exclusivos de la cocina europea e internacional, en cuanto te sientas a la mesa.
Trabajan una cocina abierta y tiene una mesa de pasta siempre dispuesta para el comensal. Así dan la bienvenida a los clientes, que pasan por los comedores para llegar al espacio principal del restaurante, una zona con ventanas que dan al jardín trasero, una de las joyas de la corona del restaurante, sin poder parar de mirar a todos los lados admirando la muy cuidada decoración estilo palazzo italiano del Renacimiento.
En cuanto a la carta, lo primero de agradecer, sí, agradecer, es que lo que debe de estar en italiano lo esté, pues no todo tiene traducción exacta al castellano y puedes pedir lo que no esperas. Es mejor aprenderse las 4 o 5 cosas que hacen falta en italiano para poder pedir exactamente lo que buscamos en cada momento.
Pasta, entrantes, panes de nivel, salsas de la donna, ensaladas mediterráneas a más no poder y sobre todo el dominio perfecto de dejar las cosas en su punto, porque la comida italiana, como casi todo, se debe de comer al punto.
Decoración romántica, exclusivos platos italianos y una bodega de nivelazo, normal que sea uno de los restaurantes más populares de Madrid.
En DolceCity Madrid: Numa Pompillo