Brunch, para los recién llegados: dícese de la comida que va entre el desayuno y la comida propiamente dicha. A medio camino de ambas en cuanto a la hora, sobre el mediodía como muy tarde, y por la cantidad, abundante pero no contundente.
Antes de nada, dejar dos cosas claras que nos hacen pensar que este brunch puede servir de comida directamente: la primera es la hora en la que lo sirven, no antes del mediodía y hasta más allá de las 3 de la tarde; la segunda es el precio, por encima de 30 euros (aunque para los niños se queda en la mitad). Es decir, contundente a una hora más española que internacional. Ojo, porque creo que sólo se sirve los domingos.
Dicho esto, y sabiendo que soy un apasionado de los brunch aunque no sea algo muy castizo, hay que reconocer que aquí se come mucho y bien. Está dividido por grupos de comida, o algo así, con lo más contundente por un lado (embutidos y tal), lo más sano por otro (ensaladas de todo tipo) y para los glotones por otro (dulces). Así puedes comer de todo pero sin necesidad de pasar por todo si no te apetece. SIrven bebida aunque no la pidas, pero además puedes elegir entre casi cualquier cosa que se te ocurra para beber mientras desayunas. Todo es muy abundante, incluso mucho para ser un brunch, de ahí que si vas algo tarde, ya te llegue hasta la hora de la cena el estómago lleno.
El lugar es modernete, muy original, apetece alargar el brunch con algo de sobremesa incluso. Pueden darse casos de terminar el brunch y pasar directamente a las copas por los alrededores, avisado quedas.
Por último, su originalidad en algunos detalles, como servir productos en latas o platos raros, las bandejas como de hospital pero con un toque singular o los postres de cosas que jamás habrías pensado que pudieran ir en un pastel. Cool.
En DolceCity Madrid: Only You-Hotel Lounge and Restaurant