
Por otro lado, todo lo que tenga que ver con la lectura puede parecer un peñazo, alejado de lo que uno entiende por un plan de día libre fuera de casa, con gente. Pero hay formas de hacer la lectura divertida, de llevarla a planes de grupo más que apetecibles. También en eso es especialista Casa del Lector. No confundir con el Círculo de Lectores, por cierto. Nada que ver.

Por ejemplo ahora tienen un plan específico para las navidades llamado Navidad en Casa del Lector, que acerca estas fiestas a lo libros, pero es sólo un ejemplo. Su idea es, a lo largo de todo el año, ir sacando punta a días clave, a acontecimientos concretos o simplemente a la historia y el arte para acercar la lectura a todo el mundo a través de talleres, exposiciones de todo tipo, jornadas, charlas... Siempre hay algo que hacer en Casa del Lector, y siempre con un denominador común: es gratis.
Además es un espacio agradable, en esos que apetece estar. Está en calma, hay respeto por el arte y las líneas y luces son las adecuadas para querer pasar un buen rato. Quizá lo único malo es que tampoco suelen ser actividades muy dinámicas, que se diga. También hay que tener en cuenta el público objetivo para el que están pensadas, pues hay cosas que hacer para grandes y para pequeños, pero no siempre son igualmente para grandes y para pequeños, pudiendo en ese caso llegar a aburrir.
En definitiva, un plan distinto para una tarde de vacaciones o de fin de semana, sin gastar un duro y aprendiendo. Poco más se puede pedir.
En DolceCity Madrid: Casa del lector