
Cómo no alucinar con un sitio donde puedes encontrar perfumes caros, patatas fritas de marcas raras, libros geniales para regalos (un poco del rollito Vips de diseño, arte, moda, etc.), tés que solo has visto en Bristol, menaje del hogar, ropa para él y para ella… En fin, Isolée es un paraíso para encontrar todo eso que quieres comprar y, sobre todo, lo que no quieres. Su local de Claudio Coello sabe en qué calle se encuentra, al ladito de Ortega y Gasset y Serrano, en plena milla de Oro madrileña, y se nota en su diseño elegante lleno de luces y una colocación muy inteligente de los productos en el generoso espacio con el que cuenta.

Para mí lo mejor de esta tienda es ese combo de productos, ese Bolero Mix del comercio, donde puedes encontrar desde unos altavoces para tu equipo de música (de diseño, por supuesto) hasta unas cubiteras de hielo con forma de perros o patitos. Mi novia se fijó en que tenían algunos productos de belleza y cosmética muy chulos como cremas de Natura Bissé, pintalabios de Lipstick Queen, Oskia Restoration Oil para la piel… o un “submarino” para el cuarto de baño que es para llevárselo a casa en el mismo momento en el que le echas el ojo.

Es un espacio contenedor de porcelana con la forma de un submarino donde meter el dispensador de jabón, el cepillo de dientes y lo que gustes. Diseñado por Héctor Serrano y disponible en varios colores… pero lo suyo es llevárselo en amarillo si tienes un poquito de sensibilidad humana.

Además: toallas Obaba con fijadores de fibra ultraligera para que no salgan volando cuando hace viento (¡qué bien me hubiera venido esto en la playa!), agua de coco, sangría, y productos “para llenar la panza” de la marca Pancracio para la que solo tengo buenas palabras y un ruego de que me manden gratis a casa todos las cestas que puedan.
Fotos: Isolée
En DolceCity Madrid: Isolée Claudio Coello