
En Chocolatarium podrás degustar el chocolate de mil y una maneras, en todas sus versiones, aromas y sabores. Desde la puerta de entrada ya huele a cacao maravillao, hasta la empuñadura que empujas para abrir la puerta es el vivo retrato de una tableta de chocolate con leche, es que estos amigos están en todo, los pequeñitos detalles son los que hacen que te sientas como en la casita de chocolate de Hansel y Gretel.

Una vez dentro del local ya no sabes dónde mirar, si a las vitrinas llenas de tartas de diferentes colores y texturas, a los bombones que están junto a la caja con formas curiosas; o a las tabletas de chocolate con letras que construyen frases ingeniosas. Puedes escoger diferentes tipos de bombones y te los llevan a la mesa para que pruebes. Yo me decidí por unos cuantos rellenos de fruta variada. ¿Quién dijo que comer chocolate no era sano?

En una de las estanterías había tabletas con nombres propios y hasta fotos hechas de chocolates variados, es todo una artesanía esto de la chocolaterapia. Además de este despliegue, imparten cursos de iniciación para aprender a atemperar el chocolate, decorar con manga pastelera tus mejores creaciones, y hacer bombones y trufas.

La verdad es que me encantaría aprender, pero sé que comería todo antes de terminarlo. Prefiero venir a Chocolatarium a ponerme gochito directamente.
Fotos 1 y galería: Autor; Fotos 2, 3 y 4: Chocolatarium
En DolceCity Madrid: Chocolatarium