
El edificio, original e imponente, nació sobre la vieja central eléctrica del Mediodía (fábrica de electricidad de combustión de carbón que suministraba a la parte sur del casco antiguo de Madrid); y los señores Jacques Herzog y Pierre de Meuron se encargaron de conservar la fachada original, dejándola además suspendida (a la fachada y al edificio) en el aire sobre una plaza abierta. De suelo desigual, inclinado aquí y allá. Vamos, que la entrada es chulísima. Como esas escaleras metálicas que te llevan a la entrada del edificio.

CaixaForum cuenta con más de 2.500 metros cuadrados para exposiciones, auditorio, salas para proyecciones, una librería ALUCINANTE, etc. Vamos ya con la expo de Méliès, una maravilla con la que pasar hora y media o dos horas aprendiendo, sorprendiéndote y disfrutando con el primer mago del cine; y también con los orígenes y evolución del propio arte cinematográfico: sombras animadas, la fantasmagoría, el ilusionismo, la linterna mágica, etc.

Un recorrido fascinante por el desarrollo del séptimo arte, inevitablemente unido a los inventos de Méliès. La estrella de la muestra es “Viaje a la luna”, de la que encontraréis bocetos, guión, vestuario, fotografías, la propia peli y mucho más.

Ha colaborado con CaixaForum la Cinémathèque Française. ¡Qué ganas me dieron de comprarme el libro de la exposición! Pero con ese precio habrá que contenerse.
En DolceCity Madrid: Georges Méliès en CaixaForum