
· En El Cementerio de las Ánimas (el mayor espacio de Europa dedicado al terror en vivo) podéis disfrutar de “La Mansión de la Familia Damm” (pasar la noche con un grupo de invitados de lo más terrorífico), el cementerio en sí (acampar en él en una tienda de campaña entre las tumbas); o una cena en el restaurante La Abadía.
· En el Parque Warner tienen el 31 de octubre una cena especial de Halloween (para la que hay que reservar) con un menú verdaderamente terrorífico: De “entradas maléficas” tenemos especialidades del camposanto como alitas, croquetas y tempura; de “primero demoníaco” tenemos festín de gusanos (ensalada de gulas con salsa cocktail); de “segundo demoníaco” hay carnaza del inframundo (solomillo de cerdo con pisto y gratén de patatas); de “dulce posesión” podemos rematar con un ataúd podrido (o sea, tarta de chocolate); y de “pócimas” elegiremos entre trago del estanque maldito (sangría), cebada del cementerio (cerveza) y chupitos. Además, hay menú especial para niños, decoración muy currada y espectáculos.

· En Faunia hay un concurso de calabazas, un taller de animales venenosos y un pasaje del terror bajo tierra.
· En el Museo de Cera hay un tren del terror donde poder visitar sentadito las figuras de Freddy Krueger, Drácula y otros iconos del miedo. En el trayecto habrá sustos a mansalva, claro.
· En el Zoo Aquarium de Madrid tiene una cosa muy interesante llamada “Cuidador por un día Halloween”, que no es el 31 de octubre sino el 1 de noviembre. Es para niños de 4 a 14 años, así que si tenéis hijos o sobrinillos seguro que disfrutarán “cuidando” de animales salvajes como rinocerontes, pandas, lémures y hasta elefantes; y limpiando las instalaciones, dándoles de comer y mucho más.
En DolceCity Madrid: El Cementerio de las Ánimas, Parque Warner, Faunia, Museo de Cera, Zoo Aquarium