Maceira: Tapas y raciones gallegas para ponerse fino en Madrid

El Maceira es uno de esos clásicos de Huertas que, quieras que no, te salva una noche en la que no sabes muy bien dónde ir. En esa estábamos mis compis de inglés (me presenté al examen del Advanced tras prepararlo en una academia), decidiendo dónde quedar el pasado viernes por la noche para celebrar que ya habíamos terminado con el examen, ¿un pub irlandés? Buena opción, pero falla el tema comida. ¿Una terracita de verano? Muy apetecible, pero nos faltaba el factor “sitio concentrado con jolgorio de fondo”. Así que uno de mis compañeros salió con un “podemos ir al Maceira y de paso nos vamos cenados”. Dicho y hecho, al Maceira que fuimos.El sitio tiene una decoración de lo más curiosa, con las paredes empapeladas de verde y unos bancos y columnas de madera por todo el local… lo que le da una autenticidad muy apreciable. La tasca española, sin trampa ni cartón. Además, mesas en plan banco de madera y unas lámparas bastante curiosas que cuelgan del techo. Por si eso fuera poco, la carta viene escrita a boli en una tablilla de madera y hay carteles del tipo “No hay Coca-Cola” cerca de la barra… ¡aquí se viene a lo que se viene, viva la tasca española, hombre ya!Vamos al lío: la pitanza. Al ser cuatro personas y con un nivel de hambre estimable, desfilaron varias raciones por nuestra mesa. El pulpo a la gallega me supo tremendo, aún admitiendo que no es el mejor que he probado ni de lejos. Las vieiras y las navajas a la plancha estaban riquísimas, así como la sepia y los pimientos de padrón.La empanada no tenía nada especial y las bravas estaban “peleonas”, que diría uno de mis compis. El remate final sí que me dejó plenamente satisfecho: una tabla de quesos con su membrillo para acompañar, ¡qué me gusta a mí este megamix! Todo ello regado por cañas servidas en vasos como los que hay en la cocina de tu madre y por un albariño al que no se le puede objetar nada. El ambiente guay y el servicio rápido y diligente. ¡Y ojito a ese apagado de luces a las doce de la noche cuando preparan la queimada!

PD. Maceira tiene otro local en la calle Huertas (que se llama “Maceiras”) que suele estar mucho más lleno y apretado, pero quizá tenga más ambientillo. ¡Elige tu propia aventura!

En DolceCity Madrid: Maceira