Mercados Gourmet, ¡cómo me gustan! Ya sabéis, esa mezcla de mercado con puestecitos así un poquito
fancy, un poquito monos, para tomarse una tapa, una cerveza o una copa (que estos mercados por la noche se animan que es una barbaridad). Y también te puedes llevar el carrito para hacer la compra, ¿eh? Eso sigue como siempre (aunque a quién vamos a engañar, carritos se ven pocos en este tipo de mercados). Digamos que han cogido lo mejor de los mercados de toda la vida y les han añadido unas gotitas de “seamos todos modernos”. ¿Me gusta? Me encanta. Tiene que haber de todo en la viña del Señor. Mercados para el carrito y mercados para el “alterneo”, claro que sí. Hoy os quiero hablar del último en el que he estado, el
Mercado de Moncloa.
Está al lado del Hotel Exe y creo que quieren crear un combo con los dos sitios, no lo sé. Yo solo entré al Mercado y la cosa promete. Promete más que da, porque está
nuevecito. Casi recién puesto. Todo limpísimo, blanco, brillante, impoluto… ¡estaban casi más apetecibles las paredes y las columnas que las cupcakes del Horno de San Onofre! Eh, he dicho casi.
Entremos ya en materia: ¿cupcakes? Pues sí. Y otras maravillas dulces en
el puesto que tienen los chicos del Horno de San Onofre en el Mercado, si acaso mi rincón favorito del Mercado de Moncloa. Veréis, desde que me hice fan de la serie “2 Broke Girls” no paro de salivar pensando en cupcakes. No falla, cada capítulo que veo es un “¡necesito una cupcake!”. Emmm… y luego
una cerveza como los hombres, eso es. En breve os contaré en DolceCity mis experiencias con las mini-magdalenas…
Pero sigamos con el mercado que nos ocupa. Han optado por la línea uniforme de
Isabela Gourmet Market para sus distintos puestos, es decir,
todos con el mismo color y apariencia… lo que dificulta separar espacios y saber dónde están los bollos, dónde las carnes y dónde el puesto de sushi (planta de arriba). Yo les daría una manita de color (y calor) no solo para diferenciarlos sino también para que el mercado fuera adquiriendo personalidad. Prometo volver dentro de unos meses para ver cómo se ha calentado la cosa, seguro que sí.
Por cierto, que a muy poquitos pasos, en la misma calle, tenéis la veterana heladería
Los Alpes sirviendo cucuruchos con bolas de helado tan ricas como siempre. ¡No os cortéis!
En DolceCity Madrid: Mercado de Moncloa