
Como su propio nombre indica, en Va de Retro apuestan por muebles que eran lo más hace ya unos cuantos años (décadas de los 50, 60 y 70), pero que han vuelto a ponerse de moda gracias a la originalidad que aportan por ese contraste con “las cosas modernas”. Pero hay mucho más que muebles vintage: mueble europeo industrial, de diseño nórdico y escandinavo; objetos de decoración y antigüedades del siglo XX y del siglo XIX, etc.

A saber: una regadera de los tiempos de antaño, botelleros de look industrial, archivadores de madera, unos cajetines la mar de hermosos de Peugeot o “Frutas selectas de Río Negro” con su metal desgastado y su madera recuperada; mesas, sillas y lámparas que sumadas al marco de una antigua chimenea te hace imaginar que ahí podrías escribir tú la gran novela americana (o al menos un e-mail bien redactado), taburetes, sofás, la parte superior de una antigua cabina de teléfono y mucho más.

Tienen un baúl metálico que me ha encantado, con sus restos de pintura, su óxido, auténtico es poco. Además es muy grande y me vendría estupendamente para esas noches que he desordenado revistas, DVD´s, libros… y no me apetece ponerme a recoger, ¡al baúl todo! Mañana será otro día.

Por si esto fuera poco, te diseñan interiores si se lo pides, alquilan sus muebles (ojito a las posibilidades de epatar al personal que ofrece esta opción), programan exposiciones de fotos, de cuadros de nuevos artistas, de algunas piezas propias de ornamentación, algún taller, etc. Va de Retro funciona porque nos vende la ilusión de que nuestra casa podría ser preciosa. Pero, ¿sabéis lo mejor? Que esa ilusión es real, se puede comprar, ¡vivan los mueble únicos!
En DolceCity Madrid: Va de Retro