
La ropa para hombre que venden en Polar (de Junk de Luxe, Just Junkies, Sixpack y otras marcas exclusivas difíciles de encontrar en otras tiendas de la capital) mezcla las últimas tendencias con las prendas sobrias; es ropa moderna, pero no llevan grandes letreros o estas cosas estrafalarias que tanto llevan ahora (los mamarrachos). En Polar hay básicos pero con originalidad (no en vano, se van a buscar la ropa a ferias y a países del norte de Europa como Dinamarca).

Lo más llamativo de la tienda es lo bien decorada y aprovechada que está; todo está perfectamente ordenado (te entra por los ojos) pero sin avasallar, con un reposo elegante maravilloso. Yo aplaudo la decoración de este local, es alucinante.

El ambiente de la tienda es especial y los brothers tratan de mantenerlo renovándola constantemente, añadiendo fichajes que ven en sus viajes o en sus búsquedas en mercadillos: cuando no es un cuadro es una colección de cómics en francés, los muñequitos de indios y vaqueros, un mapa de los barrios de Nueva York, libros y productos de papelería, mobiliario de segunda mano como baúles… todo forma un combo al que es difícil resistirse.

Si quieres ropa para hombre moderna, elegante y exclusiva en una tienda con un ambiente verdaderamente especial, pásate por Polar y no te arrepentirás.

Ah, la tienda es bastante grande y por el camino te encontrarás con bicis (¡!) y hasta una máquina DolceGusto para prepararte un capuccino mientras esperas en los probadores. Me quito el sombrero.
En DolceCity Madrid: Polar