


Yo he probado el de Bambú que es especial para pieles sensibles y recomendado para la cara por su poder reestructurante de la piel (estimula la síntesis del colágeno que poco a poco vamos perdiendo con la edad). Tiene aceite de oliva y manteca de karité, y aunque yo no soy muy fan de los jabones faciales porque siempre siento que me resecan mucho la piel, lo cierto es que me sorprendió lo cremoso que es. En vez de mojarme la cara, humedecí el jabón y las manos haciendo una espumita y luego me lo apliqué. ¡Se siente como una crema en vez de cómo un limpiador! Y la piel queda luego suave, suave….


También te animan a que fabriques tú tus propios jabones, así que si eres una persona creativa y te apetece probar, te venden todo lo que necesitas, desde las bases del jabón a los colorantes o moldes. Fantásticos para hacer regalos totalmente personalizados o por si te apetece probar con combinaciones para crearte un jabón único para tu piel.
