Martes, 13 Abril 2010

RITMONUTRICIÓN©, aliméntate al ritmo de tu cuerpo

por Clara Isabel Buedo
Equilibra tu reloj biológico y optimiza los alimentos que ingieres controlando lo que comes y cuándo lo comes; sigue el ritmo de tu propio cuerpo con este nuevo concepto nutricional: la Ritmonutrición
Si la lluvia y las bajas temperaturas no lo impiden, en breve dará comienzo en la mayoría de hogares en los que moren mujeres la archiconocida ‘Operación bikini’, un protocolo de buenas intenciones para lograr de aquí al verano una silueta de escándalo. Y aunque las mañas y artimañas para lograrlo pueden ser miles, hay que tener cabeza e intentar que la salud no se vaya en el intento.


Nada de “leyes de la compensación”: me atiborro en la comida, me sacrifico en la cena, ni dietas milagro (la de la piña, la de la sopa, la del melocotón…), bajar kilos de peso y mantener la salud en forma, requiere de sensatez y constancia, y una buena forma de lograrlo sin tener la impresión de que estamos sometidos a dietas férreas es siguiendo los dictados de la Ritmonutrición. Dicho así suena a quimera, pero no es más que alimentarse al ritmo de tu propio cuerpo, ¿cómo?

La Ritmonutrición es un nuevo concepto nutricional que deriva de la ‘cronobiología’, la ciencia que estudia los relojes biológicos de los seres vivos. Para los expertos en la materia, digamos que se trata de aportar, por la mañana y al mediodía, tirosina, que permite la síntesis de dopamina y noradrenalina, para la activación física e intelectual y la capacidad de reacción frente al estrés; y por la tarde y la noche, se requiere un aporte de triptófano, que a su vez permite la síntesis de serotonina y melatonina, favoreciendo la relajación y la preparación al sueño.

Para los profanos, diré que durante la primera mitad del día (de 5 a 17 h), los nutrientes deben ser utilizados para asegurar el gasto energético, y en la segunda mitad (de 17 a 5 h), son almacenados y utilizados para la regeneración tisular. Se trata de optimizar nuestra alimentación para equilibrar nuestro reloj biológico. Con ello, conseguiremos recobrar tanto la armonía física como psicológica y evitar trastornos metabólicos como la hipercolesterolemia o la obesidad y sobrepeso, y otros males como la astenia primaveral o el envejecimiento, entre otros.

¿Y dónde me asesoran sobre la Ritmonutrición? En el Departamento de Nutrición de Clínica Bari donde, mediante un sencillo test y otra serie de pruebas, determinan si tu organismo está equilibrado o tu ritmo biológico está desajustado, en cuyo caso se determinará qué es lo que debes tomar para compensarlo, si un mayor aporte de triptófano o de tirosina.


A grandes rasgos y como consejos generales por cortesía de Clínica Bari, deciros que son fundamentales 4 comidas al día de las cuales, desayuno y merienda son las más importantes. Las proteínas animales deben ser ingeridas por la mañana y a mediodía para activar los precursores de la tirosina; y los glúcidos (frutas, galletas, chocolate…) y lípidos (Omega 3 y 6 que contienen pescados o frutos secos entre otros), deben ser ingeridos por la tarde para asegurar un aporte de triptófano.

Toda una ciencia que requiere del control y consejo de profesionales en la materia para guiarnos en el sencillo y eficaz periplo de alimentarnos al ritmo de nuestro propio organismo. Si quieres un cuerpo 10 y una salud 100, adéntrate en la Ritmonutrición.

Ritmonutrición en Clínica Bari