Antioxidante, euforizante, afrodisíaco, estimulante, antienvejecimiento, nutritivo, elixir de belleza, tónico para el alma… Un sinfín de propiedades se le han venido atribuyendo a este manjar de dioses, tesoro de sus adictos y el cáliz de los deprimidos. Y es un no parar, primero fue para comérselo, luego para untárselo, hay hasta para olerlo a modo de ambientador del hogar y ¡hasta colonias de chocolate!
El chocolate se ha convertido en un objeto de culto que para temor de sus obsesos cada vez se reversiona y se mejora.

Un auténtico templo del chocolate es
Alma de Cacao, una
vanguardista e innovadora galería en la que se exhibe esta suculenta delicia en múltiples versiones, un universo de aromas, sabores y emociones. Ofrece una amplia variedad de creaciones con el mejor chocolate, contenidos de calidad y continentes exclusivos, pues sus envoltorios bien merecen algún comentario, sencillos, refinados y muy vanguardistas.
Bombones, trufas, cremas, frutos en chocolate, tabletas o licores, el chocolate en todas sus versiones y con su mejor esencia. Pero además de un producto insuperable, ofrecen servicios tan interesantes como recomendar el maridaje perfecto del chocolate con un buen vino —ejemplo: un cava
Grand Cuvée con trufas—, empaquetados especiales para ocasiones singulares (cumpleaños, celebraciones, felicitaciones…) e incluso, personalizados.
Disfruta de este espacio, entra, huele, siente, degusta y… sueña. Aprovecha un momento perfecto como el próximo
San Valentín para dejarte sorprender a la par que sorprendes.
En DolceCity Madrid: ALMA DE CACAO