
El Teatro Valle Inclán bajo la dirección de Gerardo Vera, nos propone una revisión de Un enemigo del pueblo (1882), una obra que podría haberse escrito hoy mismo en cualquier lugar de nuestro país, por ejemplo, en todos esos sitios donde los negocios están por encima de muchas cosas, incluso de las personas.
En Un enemigo del pueblo, Ibsen nos relata la historia del doctor Thomas Stockmann en una ciudad donde el balneario es la principal atracción y el motor de la economía local.
El doctor, que es de esos tipos que aún tienen principios, descubre que el agua está contaminada y se propone advertir a la población de los riesgos que puede suponer para la salud. Pero no iba a ser tan fácil, puesto que los intereses económicos priman sobre los sanitarios para los poderes de la ciudad, los medios de comunicación e incluso su hermano y alcalde.
Ante este escenario, Thomas tendrá que luchar ferozmente contra un entorno hostil y pagar el precio que tiene decir la verdad cuando nadie quiere oírla, siendo señalado como traidor allá donde vaya y consiguiendo por desgracia algo insólito, que el resto de la población se ponga de acuerdo para hacerle la vida imposible, poniendo en riesgo incluso a su familia.
Las obras de Henrik Ibsen siempre tuvieron un trasfondo de crítica social como se puede observar, por ejemplo, en este texto, que parece calcado de cualquier telediario de los que observamos pétreos mientras cenamos, donde un escándalo tras otro taponan nuestros oídos antes de irnos a dormir.
Una obra para disfrutar con la intensidad de los diálogos, la escenografía del propio Vera y para pensar en lo que realmente importa en la vida.
En DolceCity Madrid: Teatro Valle-Inclán
- Un enemigo del pueblo
Del 25 de Enero y hasta el 25 de Marzo de 2007
Entradas en taquilla y servicaixa