Cinco dedos en cada mano, amor por el detalle, el arte y la elegancia, ilusión y dedicación exclusiva en cada pieza y mucho, mucho talento... Parece mentira que los hermanos Juan, José y Vicente Lladró empezaran su carrera jugando con barro en las calles de Almassera, un pueblo cerca de Valencia.Sus primeras figuras de porcelana nacieron de un talento innato –y por triplicado- en un pequeño horno fabricado por ellos mismos. Ahora, muy cerca de donde instalaron su primer taller se levanta La Ciudad de la Porcelana donde cientos de trabajadores dedican su tiempo a elaborar artesanalmente piezas únicas por su belleza y elegancia.
Sus figuras son conocidas en todo el mundo y decoran las vitrinas de los hogares más exquisitos. Observándolas, independientemente de que el estilo pueda gustar más o menos, resulta difícil no sentir esa dedicación y ternura que cada obra transmite. Elegantes, expresivas y humanas, las piezas de Lladró son un canto a la delicadeza y al sentimiento.
Además, Lladró aprovecha cada ocasión para progresar y crear. Concretamente, entre sus trabajos, destaca una colección, Vientos del Mar, realizada con motivo de la Copa América de Vela que tendrá lugar el próximo año en Valencia. Para esta colección, el Mediterráneo se ha convertido en un verdadero mar de inspiración.
En Madrid la firma dispone de dos establecimientos, uno en Gran Vía y otro en la calle Serrano donde se pueden adquirir sus creaciones.
Por cierto, un buen consejo: mantener fuera del alcance de los niños.
En DolceCity Madrid: Lladró
