Miércoles, 25 Agosto 2010

Guía para sobrevivir en Dublín (2): DÍAS LABORABLES

por Juan Rodríguez
He aquí unas cuantas claves (podrían ser otras) para entender el día a día del dublinés medio: comen y trabajan como en cualquier otra ciudad, pero con un par de cosas muy características suyas.
Un “working day” en Dublín es como en el resto del mundo: gente madrugando para ir a trabajar. Es decir, gente apelotonándose en los medios de transporte. Aquí no hay metro, pero sí tranvía (LUAS, palabra irlandesa que significa “velocidad”) y autobuses con grandes carteles anunciando el próximo estreno hollywoodiense (ver guía: 1ª parte, 2ª parte y 3ª parte). Los dublineses son adictos a ir bebiendo café por la calle, aquí cada local es un Starbucks en potencia con sus “coffee takeaway”, a hojear el periódico gratuito (el Metro de turno asociado con el Evening Herald dublinés) y a escuchar morning shows en la radio, ya sabes, programas matutinos de música y bromas tipo “Anda ya” o “No somos nadie”. Te recomiendo especialmente “The Strawberry Alarm Clock” en el 104.0 FM, con un buen “craic” (rollo) increíble. Un inciso sobre los periódicos, mi favorito y el de la gente de bien es el Irish Times, just saying.


La jornada suele ser continua y el descanso para comer, el “lunch”, suele durar 30 minutos; momento en el que los oficinistas se precipitan sobre cualquier deli (tienditas de alimentación donde hacen unos bocatas de rechupete) o el local O´Briens, auténtica institución sandwichera con “emparedados” (que dirían en los dibujos) muy ricos y muy caros. Si tu oficina está cerca de los canales de Dublín, qué mejor que dar un paseo, cuando pega el sol y se reflejan los edificios en el agua son preciosos (no te preocupes de no pisar nada sospechoso en el suelo, apenas hay perros en esta ciudad y los que hay son muy limpitos).


Como las tiendas suelen cerrar a horarios criminales (no busques nada abierto más allá de las seis de la tarde, a no ser que sea un jueves, día que abren al menos un par de horas más), lo mejor al terminar el trabajo es dar una vuelta por las calles concurridas, ver a unos bailarines en Henry Street o a los viejos parroquianos alrededor de la estatua de James Joyce en Talbot Street. Si cae la noche y no estás en casa, puedes rematar el día viendo aquella película que viste anunciada en el autobús en cualquiera de los dos cines más céntricos de Dublín: el Cineworld (las multisalas de toda la vida) o el Savoy (el cine más viejo de Dublín, había otros anteriores pero ya no están en pie).


De vuelta a casa, dale chance a los shows más populares en las teles dublinesas: “The X Factor” (con esa Cheryl Cole que me quita el sentido), “Come dine with me” o “Four weddings” acompañado de una buena pinta y los estrambóticos sonidos de tu vecino paquistaní en el piso de al lado. Just another day in Dublin.

En DolceCity Dublin: Días laborables

Días laborables ( ver plano )

O'Connell St
Tel: +35301
Web:

He aquí unas cuantas claves (podrían ser otras) para entender el día a día del dublinés medio: comen y trabajan como en cualquier otra ciudad, pero con un par de cosas muy características suyas.