
Atención al combo azucarado que me pedí para rematar mi sobremesa: una tarta de zanahoria (mi favorita desde hace años) y un té. No perdáis ripio del que se pidió mi novia: tarta de queso al estilo de Nueva York con frambuesa por encima y un café con leche. ¡Ay, mamá, qué gozo! Las tartas que hacen en esta preciosa y cuidada cafetería de Temple Bar demuestran que el nombre del local no lo pusieron porque sí. En cuestión de tartas, ésta gente sabe lo que se hace. La de queso estaba deliciosa y la de zanahoria era, sencillamente, galáctica.

(La tarta de zanahoria sabe tan bien como luce)
Ojo, que también podéis ir a comer: sándwiches (de tamaños generosos), ensaladas, sopas, quiches y alguna otra delicia que contentarán al más exigente de los comensales.
Es importante acudir antes de la hora del “lunch”, entre las 12 y las 2 de la tarde esta tienda (al igual que su hermana de Cow´s Lane) se inunda de oficinistas de trabajos cercanos. Son inteligentes, se toman un descanso en el Cielo de las tartas, donde uno se olvida hasta del frío y de la lluvia que hace fuera… Un detalle que me encantó: los camareros se pasean con una jarra rellenándote el vaso de agua, porque son tan adorables como el local donde trabajan.

(Hugh Grant, goloso él, también come tartas en Queen of tarts)
En DolceCity Dublin: Queen of Tarts