
Reflexiono y concluyo que tener todas las sábanas de algodón egipcio es un lujo que no está al alcance de cualquier mileurista que se precie, pero, creedme, la carta de los reyes magos obra milagros en este sentido.
Reflexiono y concluyo que tener todas las sábanas de algodón egipcio es un lujo que no está al alcance de cualquier mileurista que se precie, pero, creedme, la carta de los reyes magos obra milagros en este sentido.
Todos tenemos nuestras manías y desde muy pequeños sentimos predilección por unas sábanas, una colcha o una manta de la que no queremos prescindir. Me vienen a la memoria aquellos padres esforzados que, cuando tienen que dejar al niño en casa de los Leer más
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