Este año he empezado tarde la temporada de helado. Lo hice ayer gracias a La Glace, que encontramos por casualidad mientras dábamos un paseo por el ahora más peatonal Paseo de Sant Joan. Era después de un brunch delicioso en el Picnic Restaurant, donde no comimos postre, haciendo espacio, sin saberlo, para lo que vendría después. El pequeño escaparate en azul claro y blanco y con tipografía infantil nos llamó la atención y, después fue, el observar que aquí ofrecen helados artesanos en una carta breve pero en la que no faltan los grandes clásicos. También nos sedujo el barril exterior rojo acompañado de 2 taburetes que es el único sitio para sentarse en La Glace; se trata, pues, de un sitio para llevar aunque si tienes suerte, como nosotras, también te puedes sentar en esta mini terraza habilitada a disfrutar de tu helado…
O de tu horchata con fartons, otra de sus especialidades cuando llega el buen tiempo. Según cuentan, cada martes reciben su pedido de horchata elaborada con azúcar de caña ecológico y también presentan una variedad sin azúcar. Puedes disfrutarlo en ración individual o bien también puedes hacer un pedido para llevártela a casa. Yo la horchata no la he probado pero, viendo que es ecológica, me hace pensar en la de Bodevici de Gracia, que, como sabréis, es mi favorita en Barcelona por su gusto intenso y auténtico. Habrá que probarla también en La Glace…
Los helados también se pueden encargar para llevártelos a casa, lo mejor para las cenas veraniegas en casa con amigos, pues es un postre ideal, refrescante y delicioso; además, sin gluten, por lo que es apto también para celíacos. Yo probé el helado de limón, el de pistacho y el de straciatella y la verdad es que los tres me gustaron mucho por sabor y “cremosidad”. Aparte de los helados y la horchata, en La Glace también elaboran crêpes, gofres y zumos naturales, con la elaboración artesanal como punto en común para endulzar las vidas de los vecinos del Paseo de Sant Joan, y de los barceloneses.
En DolceCity Barcelona: La Glace
