
Materiales © Club de la Aguja (Facebook)
Situada en unos bajos en la esquina de Ganduxer con Via Augusta pasa desapercibida para la muchedumbre que pasea atareada por el asfalto. Dentro, en cambio, reina la camaradería y el entusiasmo por parte de clientas habituales que vienen aquí a tejer sus piezas, mientras piden consejo al personal o fichan nuevos materiales para sus próximas piezas. El nombre ya da una idea de este ambiente familiar y lo cierto es que siempre que he visitado la tienda éste ha sido uno de los aspectos más sorprendentes. También el amplio espacio del que disponen: 400 m2 dedicados a costura, patchwork y, desde hace unos meses, scrapbook, renovando su oferta para llegar a un público más amplio, y joven.

Muestra de patchwork © Club de la Aguja (Flickr)
En las tres disciplinas ofrecen los mejores productos del mercado y las últimas novedades y tendencias en una oferta muy vasta que, sin duda, es uno de los mayores reclamos de la tienda. Como lo es también su equipo humano, auténtico experto en cada técnica, así como el completo calendario de talleres que ofrecen, tanto para iniciarse como para perfeccionar técnicas ya conocidas y tejer piezas a lo largo de varios días (o semanas). Desde una sencilla y emotiva postal hand-made hasta una impresionante colcha de patchwork con telas vintage, en el Club de la Aguja el protagonismo se lo lleva siempre el trabajo manual hasta el punto que no venden ningún producto listo para lucir, tan solo los materiales para que seas tú quien lo cree.En DolceCity Barcelona: Club de la Aguja