
Su alma mater es Cecilia, quien ha logrado que en, algo más de un año, su coqueto establecimiento se haya convertido en todo un centro cultural en torno al italiano. Y es que, inquieta como es, organiza diferentes actividades y ciclos literarios para fomentar la reunión social y el intercambio y, al parecer, el público ha respondido estupendamente.

Y no me extraña porque al entrar en Le Nuvole uno se siente como en casa. La zona de la entrada no es demasiado grande lo que favorece el trato cercano y personal –como debe ser, por otra parte, en un negocio de estas características-, mientras que al fondo dispone de más salas donde se reúnen en sus numerosos coloquios y actividades. Ambos ambientes tienen en común una decoración sencilla y muy acogedora, con los diferentes libros al alcance de la mano para poder consultar con facilidad.

Una de sus reuniones literarias; en este caso de poesía.
Novela, ensayo, literatura infantil, teatro, poesía… Cecilia ofrece títulos para todas las inquietudes y, lo mejor, buenos consejos si nos sabes por dónde ir. Yo me acerqué hace unas semanas para comprar un regalo y salí encantada. Fue entonces cuando Cecilia me informó sobre las numerosas actividades que organiza, a las que acuden tanto italianos que residen en Barcelona como catalanes que quieren aprender questa bella lingua. La entrega de Cecilia es tal que me comentó que, incluso, está pensando en organizar un viaje para culminar el círculo literario en torno a autores sicilianos que están desarrollando este invierno. Aplaudo esta dedicación y pasión por lo que uno hace, ¡así no hay crisis que valga!
En DolceCity Barcelona: Le Nuvole