
Y es que parece que últimamente la cerveza está de moda. Son varios los locales que han abierto sus puertas en los últimos meses teniendo como punto de mira esta bebida alcohólica que durante décadas no gozó del prestigio y la sofisticación de otra bebida para tomar a media tarde, el vino. Eso ya es cosa del pasado y ahora la cerveza goza de un protagonismo inusitado, con un público cada vez más numeroso que se interesa en descubrir nuevas variedades, composiciones y nombres, haciendo de la cerveza algo mucho más complejo. La Cervesera Artesana fue pionera en esta corriente pues abrió sus puertas en 1993. Esta ventaja le ha permitido que, con el tiempo, haya decidido apostar por fabricar su propia cerveza de la que aquí podréis degustar las distintas referencias que ofrece, siempre producidas al momento siguiendo el estilo tradicional inglés y, entre las que sorprenden la HoneyAle (con miel y recomendada por una buena amiga mía), la Boletus y la Especies, aunque hay otras más comunes como la Negra y la Tostada.
Pero, por supuesto, también podréis viajar por todo el globo a través de las muchas referencias que incluye su carta de bebidas. Desde Libia a Japón, pasando por Alemania y Bélgica, son muchos los nombres por descubrir y, lo mejor, aprender pues la carta incluye explicaciones para los no iniciados y el servicio siempre está dispuesto a aconsejar al visitante. Estos casi 20 años de andadura son toda una garantía y convierten a La Cervesera Artesana en una referencia ineludible no solo en el mapa gastronómico barcelonés, sino también nacional. No se me ocurre mejor sitio para empezar a dar forma a una nueva pasión cervecera…
En DolceCity Barcelona: La Cervesera Artesana