Reconozco que nunca antes había oído a hablar de él. Pero, al ver una nueva tienda de joyería en plata en plena rambla Catalunya, mis pies se detuvieron al instante y entré para informarme. Estoy hablando de la tienda que Thomas Sabo abrió en diciembre en Barcelona, la primera aquí y la segunda en España, para traernos su visión tan particular de la joyería. Y es que esta marca que nació en 1984 en Baviera, ahora está en plena fase de expansión, con nuevos puntos de venta que se inauguran cada día en ciudades tan dispares como Dublín y Hanoi. ¿La clave de su éxito? Pues una joyería original y joven en plata de alta calidad que destaca por su diseño y por saber adaptarse a las tendencias de cada momento.

Dos veces al año saca nuevas colecciones, siempre aptas para distintos estilos de público, tanto femenino como masculino, pues en Thomas Sabo defienden una joyería abiertamente unisex, aunque hay que admitir que, como es habitual en este tipo de producto, al final la mujer tienen más donde elegir. Todas las piezas están realizadas en plata, concretamente plata Silver 925, sinónimo de calidad, y, como mucho, van adornadas con piedras de colores. Pero no por ello hablamos de una joyería sencilla, todo lo contrario, pues es gracias a su atrevido diseño que Thomas Sabo ha conseguido hacerse un hueco a nivel internacional.
Aunque yo, de todo lo que vi en la tienda, me quedaría, sin pensarlo dos veces, en alguna de sus pulseras con charms. Y es que Thomas Sabo es un experto en la materia, con más de 500 modelos distintos de colgantes para elegir. ¡Qué locura! Yo que me conformaba con mi pulsera de Agatha con tres simples colgantes –eso sí, elegidos con mucho cariño-, veo que, con respecto a charms, el austríaco gana a la firma francesa por goleada. De hecho, fue él quien volvió a poner de moda las llamadas “pulseras de los pobres”. Y con qué éxito. Y es normal, pues la gracia radica en que cada uno puede hacerse la joya a su medida, según sus gustos y pasiones. Eso sí, debo advertiros que, en cuanto a precios, no serían precisamente para “pobres”.
En DolceCity Barcelona: Thomas Sabo
En DolceCity Barcelona: Thomas Sabo