El período estival y, sobre todo, las vacaciones es ese momento mítico en el que el tiempo se detiene por un instante y parece que todo es posible. La realidad queda por unos días suspendida, transformada por la mera voluntad de que las cosas vayan bien, tal como sucede en las creaciones de Ahmet Öğüt.
Ahmet Öğüt busca cuestionar el orden social, alterando ligeramente la realidad, como muestra en la instalación Across the slope. El SEAT 131, estandarte de las clases trabajadoras de toda Europa, se convierte por obra de la intervención de este artista en una limusina que nunca existió, en el otro lado del espejo del País de las Maravillas. De utilitario a cochazo de lujo.
El automóvil conforma parte importante del universo creativo de Öğüt, pues para él representa lo mejor y lo peor de la modernidad. Es síntoma de progreso y mejora, pero también una imposición de consumo que te obliga a homologarte a los demás. Sus obras se mueven entre estos dos parámetros: la esperanza y la decepción, pero no les falta el humor para afrontar los nuevos retos que propone un mundo en continuo cambio.
También resulta muy interesante la serie de dibujos que presenta en el CASM, Small icons, que el visitante podrá llevarse consigo en forma de calcomanías.
Ahmet Öğüt: Across the slope
Hasta el 12 de octubre de 2008
CASM. Centre d'Art Santa Mònica
