
Cogiendo como referente al ilustre Robert Houdin, quien revolucionó el género del ilusionismo hace ahora ya más de cien años, y a Méliès, el mago del cine más primitivo, Hausson logra recrear esa forma poética de presdigitación que nos transporta al París de finales del siglo XIX y principios del siglo pasado.
Este retorno a los orígenes es, pues, una revisitación de las Soirées Fantastiques de Houdin, famosas porque, para el asombro de un público burgués cerrado y deminónico, era la primera vez que encima de un escenario alguien hacía desaparecer cosas y personas. Esto lo erigió como el padre de la magia moderna y ahora Hausson lo acerca a una audiencia contemporánea para demostrar la vigencia de sus trucos, como, por ejemplo, el de hacer levitar a alguien del público.
Un acompañamiento de música de cámara en directo ayuda a crear una atmósfera engimática en la que la atención recae sólo en las expertas manos de Hausson y sus elegantes movimientos. Para creer que todo es posible.
Hasta el 29 de julio
Representaciones:
De martes a sábado a les 21 h
Domingo a les 19 h
Brossa Espai Escènic